La enfermera Nayeli Dávalos Ticlio, quien desapareció el 23 de febrero, dos días después de que se le viera prestando ayuda durante la tragedia del Real Plaza de Trujillo, región La Libertad, fue encontrada sin vida por agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Sus restos fueron encontrados en una zona descampada ubicada en la carretera al centro poblado Tanguche, en el distrito de Chao, provincia de Virú,
región La Libertad.

La ubicación fue posible tras la captura de tres personas, quienes presuntamente serían los responsables de la desaparición y muerte de la joven. Ellos fueron identificados como Jazmín Pierina Ramírez Pérez (23); alias Chat Jazmín; Hans Alfredo Saavedra Malca (35), alias Loco Hans; y Julian Reyes Chávez, alias Viejo Julián, a quien la Policía sindica como lugarteniente de alias “Cuchillo”, sospechoso de ser el principal responsable de la masacre en Pataz.
Ramírez Pérez fue intervenida en el sector Indoamérica, en el distrito de La Esperanza, mientras se desplazaba en el vehículo T7Y-397, donde también estaba el Viejo Julián; mientras que Saavedra Malca fue capturado horas después en el óvalo El Ingenio, en el distrito de Paiján, en la provincia de Ascope, cuando intentaba huir a Chiclayo. Ambos tenían orden de captura.
Durante la intervención se incautó un chaleco antibalas y un artefacto explosivo, y otras especies que están en manos de las autoridades para
continuar con las investigaciones.

Nayeli Dávalos deja en orfandad a una menor de edad, por lo que la familia pide que caiga todo el peso de la ley a aquellos que acabaron con su vida.