La Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass) destaca la necesidad de inversiones que aseguren el abastecimiento de agua y que hay diversos mecanismos de financiamiento.
El presidente de la Sunass, Mauro Gutiérrez, concedió una entrevista al Diario El Peruano para tratar expectativas del regulador.
- ¿Cuánto de inversión es necesaria para cubrir la brecha de infraestructura de los servicios de agua y alcantarillado a escala nacional?
–Es importante indicar que el reto para cubrir las inversiones de largo plazo alcanza alrededor de 120,000 millones de soles, y a veces solo se piensa que es construcción de la red, es decir, que llegue la tubería o el caño a la casa, pero también se requieren inversiones para asegurar que haya agua, es decir, que permitan el almacenamiento para abastecernos del recurso hídrico cuando hayan sequías.
Eso hace que las inversiones sean grandes e importantes, considerando que la responsabilidad va más allá de la ejecución solo por parte de las Entidades Prestadoras de Servicios de Saneamiento (EPS).
–¿Cuáles otras entidades deben estar más involucradas?
–El Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, como el encargado de la inversión pública, es un actor importante para el cierre de esta brecha. Pero también está la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (ProInversión), que se encarga de promover las asociaciones público-privadas (APP) y obras por impuestos con el fin de ver la forma, ante la necesidad de inversiones, de desarrollar mecanismos que permitan coordinar la ejecución de proyectos.
Una de las cosas que planteamos, ante el hecho de necesitar más inversiones, es imaginarse una localidad que no cuenta con agua por falta de la misma red; eso finalmente tiene un costo, pues el hecho de no invertir y estar a la espera de las obras no significa que no haya un costo para su población, la cual tiene que abastecerse de fuentes de agua de menor calidad y enfrentar enfermedades diarreicas e infecciones respiratorias agudas, además de que los niños, al encargarse de buscar el agua, gastan más tiempo de lo que podrían estar usándolo en estudiar, lo cual finalmente tiene impactos en el largo plazo.
–¿Se puede cuantificar ese impacto?
–La idea justamente es identificar cuántos son esos costos sociales para acelerar los procesos de inversión. Actualmente, ya sea por la complejidad del sistema de inversión pública o por ciertas trabas que conlleva la inversión, un proyecto en agua potable puede demorar hasta más de 10 años, desde que surge la idea hasta que se implementa, y resulta obvio pensar que luego de ese tiempo la demanda no será la misma porque en 10 años la población crece, así que cuando el proyecto culmina, la demanda termina superando a lo que el proyecto tenía pensado satisfacer.
Por eso es necesario establecer mecanismos de coordinación entre todos los actores porque la Sunass, como entidad reguladora, interviene en la determinación de la tarifa, que ayuda a financiar parte de las inversiones, pero no resulta suficiente.
Con tarifas se puede financiar alrededor de 1,000 millones de soles por año, pero cerrar la brecha requiere 120,000 millones de soles. Entonces, hacer este cierre solo con tarifas sería insuficiente y eso es necesario visibilizarlo, por ello es fundamental mostrar qué otros mecanismos de financiamiento deben estar presentes.
–¿El monto de 120,000 millones de soles considera la conservación o recuperación de las cabeceras de cuenca como fuentes de agua?
–En gran medida solo consideran las que se conocen como ‘inversiones grises’ (redes e instalaciones). Hay otras inversiones que tienen que ver con la conservación y la recuperación de cabeceras de cuenca que no están dentro de los 120,000 millones de soles, pero Sunass tiene una estimación preliminar que está en el orden de los 17,000 millones de soles que se requerirían para la recuperación y la conservación.
Ahí hay un tema importante para llamar a la reflexión en general a toda la sociedad peruana porque cuando no conservamos adecuadamente la cuenca y queremos recuperarla, un proyecto de recuperación cuesta hasta cinco veces o seis veces más que un proyecto de conservación. Reparar es más difícil que conservar y es mucho más caro, por eso es esencial saberlo, pues a veces no nos damos cuenta de que las cabeceras de cuenca tienen un papel fundamental.
–¿Cómo se explica eso?
–Lo cierto es que una cabecera degradada, cuando cae una lluvia intensa, tiene menos capacidad de regular la fuerza con la que viene el agua, pues como no hay vegetación la lluvia pasa directamente generando aluviones y causando daños materiales.
En cambio, cuando hay una cabecera de cuenca con una vegetación importante, tiene una capacidad de absorción mayor y esas lluvias mayores terminan aprovechándose porque ingresan hacia la tierra y luego pueden ser recuperadas a través de pozos o de galerías filtrantes que sirven para abastecer a las ciudades cuando no hay lluvias.
–¿Se necesita un sinceramiento de tarifas de agua en el Perú?
–El Perú tiene una tarifa media que incluso está en el primer bloque de las tarifas que se cobran en otros países de América Latina. No podemos decir que la tarifa esté retrasada, la tarifa en el Perú responde a costos, pero lo cierto es que las necesidades de inversión son tan grandes que si tuviéramos que financiar todo con tarifas, en algunos casos podría implicar variaciones muy importantes del pago, por eso se requieren otros mecanismos de financiamiento.
–Obras por impuestos y asociaciones público privadas, por ejemplo.
–Así es, pero también inversión pública de manera importante. Muchas veces el presupuesto inicial de apertura en las entidades públicas no se termina de ejecutar de manera total.
Entonces, sí se requiere una revisión completa del sistema de inversión pública, no solo para el tema del agua, sino en general para hacer mecanismos más ágiles que permitan cumplir lo proyectado, incluso para que en el Presupuesto General de la República el componente de inversión se cumpla al finalizar el año.
Datos
- El Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento tiene en ejecución 262 proyectos de agua y alcantarillado por un monto total de inversión de 8,474 millones de soles para beneficiar a 2.5 millones de personas.
- De ese total, 49 proyectos se ejecutan en el ámbito urbano y 213 en las zonas rurales.
- La Agencia de Promoción de la Inversión Privada (ProInversión) tiene en cartera la adjudicación de 18 proyectos en el sector Saneamiento durante el período 2025-2026, que beneficiarán a 7 millones de habitantes en 13 regiones y que significará un costo total de 2,593 millones de dólares.
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(FIN) DOP/SDD