La Dirección General de Búsqueda de Personas Desaparecidas utilizará una aeronave no tripulada (dron) para verificar probables sitios de entierro en zonas de difícil acceso y recoger valiosa información para la búsqueda de personas desaparecidas durante el periodo de violencia 1980-2000, informó el Ministerio de Justicia.
El moderno equipo está diseñado para el trabajo en zonas de temperaturas extremas y tiene un rango de alcance de ocho kilómetros.
Además, cuenta con una cámara de alta resolución para obtener un excelente detalle de la topografía y planificar las intervenciones en las diferentes zonas en donde se vienen efectuando las investigaciones humanitarias.
Asimismo, tiene un tiempo de vuelo de 38 minutos.
Gracias al empleo de un dron, se verificó en octubre del año pasado los probables sitios de entierro relacionados al caso Tinco-Saccatoma, comunidades ubicadas en el distrito de Cayara, provincia de Víctor Fajardo, región Ayacucho.
En aquella oportunidad, se exploraron los terrenos en un barranco y dentro de un cráter. Sin el uso del dron, el acceso a estos lugares hubiese sido demasiado complicado.
Con los datos obtenidos y la información de contexto recogida durante los trabajos de investigación se elevó un informe humanitario al Ministerio Público, a fin de realizar una intervención conjunta y recuperar los restos humanos para brindar respuestas a los familiares de las víctimas que aún continúan sin saber el paradero de sus seres queridos.
Esta exitosa experiencia del uso de un dron evidenció la necesidad de contar con un equipo propio para facilitar la búsqueda en las diferentes regiones del país.
La nueva herramienta, junto al Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Sitios de Entierro (Renade) y al Banco de Datos Genéticos (BDG), complementará la búsqueda humanitaria de miles de personas que desaparecieron durante el periodo de violencia 1980-2000.
(FIN) NDP/VVS
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Publicado: 24/2/2020