El castigo físico y humillante contra niños y adolescentes es una costumbre negativa muy arraigada en la sociedad peruana y si bien hay una ley aún sin reglamentar que lo prohíbe, no bastará para frenar estos abusos, por lo que es urgente trabajar para cambiar la mentalidad de la gente, afirmó la Defensoría del Pueblo.
“Se requiere mucho más que una norma para erradicar el castigo físico y humillante contra los menores. Es un trabajo arduo intersectorial que debe hacerse porque se trata de cambiar la cultura según la cual los golpes y la violencia, física o verbal, son una forma de corregir y educar”, señaló Andina Andina la defensora adjunta para Niños y Adolescentes, Matilde Cobeñas.
Citando estadísticas de la Encuesta Nacional Demográfica y de Salud familiar 2016 (ENDES), Cobeñas dijo que un porcentaje muy importante de
madres y padres, pero sobre todo de las primeras, considera que los golpes sirven para formar a un niño. Generalmente, dijo,
son personas sin educación, que pertenecen al quintil inferior de pobreza.
“Nada justifica un acto de violencia contra un niño o niña. Tenemos que incentivar una forma de crianza positiva para los niños”, remarcó al celebrarse hoy el Día Internacional de los Niños Víctimas Inocentes de Agresión.
Cobeñas sostuvo que se debe trabajar para cambiar la mentalidad de los padres a fin de lograr dos objetivos: tomar conciencia de que sus hijos no son su propiedad y que tienen derecho al buen trato desde el nacimiento.
La especialista advirtió que la violencia que se ejerce contra un niño puede tener consecuencias irreversibles, ya que lo pueden convertir en un ser tímido, inseguro, con mucho miedo pero también agresivo.
En otro momento, señaló que si bien la Ley 30403 prohíbe el castigo físico y humillante y deroga el artículo del Código de los niños y Adolescentes sobre la corrección moderada, las sanciones para los padres agresores se contemplan en el ámbito penal.
Consultada sobe los casos de madres o padres que golpean a sus hijos o les jalonean el cabello pero no le causan lesiones graves, la experta dijo que como no hay sanción penal para ellos, el Estado debe obligarlos a pasar por programas donde aprendan pautas de crianza positivas o para someterse a algún tratamiento de salud emocional.
El Día Internacional de los Niños Víctimas Inocentes de la Agresión fue instituido en agosto de 1982 por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
(FIN) ART/RRC
JRA
Publicado: 4/6/2017