El coronavirus provocó la muerte de 1.331 personas en hospitales en Francia desde que empezó la epidemia, un balance multiplicado por cinco en una semana, indicó este miércoles el director general de Sanidad, Jérôme Salomon.
Además 2.827 pacientes estaban este miércoles en reanimación, indicó.
Las cifras suponen un aumento de 231 fallecidos y 311 nuevos pacientes en reanimación comparado con la víspera, sobre un total de 11.539 enfermos hospitalizados (+1.363), según Salomon.
"Tenemos una epidemia de extensión nacional que se agrava rápidamente", indicó.
Considerando los casi 3,000 pacientes en reanimación "es un número considerable, excepcional en un tiempo tan breve y por una sola enfermedad", según el responsable.
En la región de París hay "gran tensión", dijo Salomon, a pesar de los "esfuerzos considerables para abrir centenares de camas de reanimación tras haber multiplicado por dos" el número de camas disponibles.
Según el responsable, "la crisis será larga, los próximos días serán particularmente difíciles".