La representante del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en el Perú, Carmen Burbano, destacó en entrevista con el Diario Oficial El Peruano que el compromiso del Gobierno es reducir la anemia al 19% en el 2021, año del Bicentenario de la Independencia.
–Es un indicador importantísimo de la prioridad que le está otorgando el Gobierno a la lucha contra la desnutrición y el hambre lo que saluda el PMA. Ahora, como hemos dicho durante la sesión que se realizó en Roma, donde se aprobó esta estrategia, el Ejecutivo identificó algunas brechas que hay que cerrar, un camino que falta por recorrer y ciertos retos por cumplir.
El reto más importante, que también está dentro de las prioridades del Gobierno, es el de la anemia. El hecho de que el 43% de niños menores de 3 años en este país sufra del mal es el indicador más importante para decir si este país puede o no desarrollarse socialmente a futuro.
–¿Qué otros retos se afrontarán en estos próximos cinco años?
–El otro tema es el de la desnutrición crónica, que afecta a los niños menores de 5 años. Se avanzó mucho en esta lucha y aquí hay que saludar que el Perú sea uno de los pocos países, y el único a escala regional, que ha tenido éxito en la reducción de la desnutrición crónica. Se ha reducido a la mitad de los últimos 10 años y eso es digno de reconocer. Sin embargo, aún existen brechas preocupantes en ciertas zonas del país.
En la Sierra, la Selva, los pueblos indígenas y, sobre todo, en las comunidades más vulnerables y pobres los índices de desnutrición crónica llegan hasta el 30%, mientras que el promedio nacional es de 13%. Entonces ahí se identifican un poco las brechas que existen.
Mientras, el problema de la anemia está en todo el país, en todos lados, en todos los estratos socioeconómicos y todas las regiones.
El otro reto importante es el de la obesidad y el sobrepeso. Nos preocupa y le preocupa al Gobierno el tema de los indicadores que van en aumento, sobre todo en los escolares.
Estamos hablando de que tres de cada diez niños en el país sufren de sobrepeso u obesidad. Y si hablamos, por ejemplo, en Lima, la mitad de los niños en edad escolar tiene este problema y esto, lamentablemente, según los indicadores últimos, está yendo en aumento. Entonces, son temas que hay que atacar de manera prioritaria, ahora.
–¿Cómo atacar estas brechas, cómo intervenir para que estas cifras sigan reduciéndose?
–Con el Gobierno acordamos que, primero, es importantísimo que el país entero se proponga resolver estos problemas. Es decir, no es solo una tarea del Ejecutivo, aunque obviamente está asumiendo su responsabilidad, es trascendental que el sector privado entre en la jugada, que apoyen los medios de comunicación, que participen la Academia y la sociedad. Por eso, estamos impulsando, en conjunto con el Gobierno, una alianza nacional contra el hambre y la desnutrición.
Esa es una primera etapa, pero es una fase importantísima de concertación. Una decisión estatal nacional de que este tema tiene que ser una prioridad para adelante.
El otro asunto que es también muy importante es la participación de los distintos sectores del Gobierno en esta tarea. El problema de la anemia, desnutrición, obesidad y sobrepeso no es solo una responsabilidad o competencia del Ministerio de Salud, sino también de otros portafolios.
Creo que eso se ha evidenciado, por ejemplo, dentro de la Comisión Intersectorial de Asuntos Sociales (CIAS), donde se ha visto que, por ejemplo, los portafolios de Educación, Agricultura, Vivienda, de Producción y de Desarrollo e Inclusión Social son los sectores clave que deberían estar armando una estrategia conjunta para atacar este problema.
–En este aspecto, debemos saber cuál es la realidad…
–Una cosa que tenemos que saludar es la creación, a cargo del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) y estamos apoyando desde del PMA, de un Observatorio Nacional Contra la Anemia, como un esfuerzo específico de realizar un seguimiento a los compromisos e indicadores.
Aquí tenemos que recordar que el compromiso y las metas del Gobierno están en llevar la anemia del 43% al 19% en el 2021. Eso quiere decir que la reducción debería estar en alrededor de 5 o 6 puntos porcentuales al año para que se pueda cumplir con el objetivo. Y como dicen los ministros, lo que no se mide no progresa.
Entonces, es importantísimo que haya metas anuales y compromisos específicos de cada uno de los sectores y gobiernos regionales en este tema. Esta es una guerra que se gana también en el plato de comida, en la familia, todos los días del año.
Plan intersectorial y la intervención privada
–¿Los sectores estatales ya están tomando conciencia de involucrarse más en la lucha contra la anemia y desnutrición?
–Sí. Eso lo vimos en la última sesión de la CIAS a donde fuimos invitados como organismo internacional. Saludamos la iniciativa del Midis y de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) de llamar a una reunión más amplia de la comisión, que incluía también a la sociedad, Naciones Unidas y sector privado. Se debe lograr un plan intersectorial de lucha contra la anemia y desnutrición y es en lo que trabaja el Gobierno.
–¿Cómo captar el interés del sector privado y ciudadano?
–Lo primero que estamos haciendo con el Gobierno es generar espacios. Por ejemplo, se creó un consejo consultivo del sector privado para ver cómo, desde los gremios, se puede apoyar estos objetivos del Ejecutivo. Ahí, el sector privado tiene muchas ganas y mucho interés en trabajar con el Gobierno, Naciones Unidas y los otros sectores de la población. Ganas no faltan, interés no falta. Lo que hay que hacer es buscar avenidas para que el empresariado invierta de la manera más productiva para apoyar estos temas.
–¿Ya hay compromisos y voluntades para cubrir los 40 millones de soles que se necesitan para financiar las actividades en los 5 años?
–Es importantísimo recalcar que las actividades del PMA se realizan mediante donaciones voluntarias de distintos países, empresas, etcétera. El presupuesto está y la voluntad también, pero se necesita una estrategia de captación de recursos y lo estamos haciendo en conjunto con el Ejecutivo. Para los primeros dos años tenemos ya el 80% del financiamiento en compromisos firmes.
(FIN) DOP/VVS
Publicado: 12/12/2017