En medio de un profundo fervor religioso, la población católica de Puno y autoridades participaron ayer de los actos celebratorios por el día central de la festividad en honor a la Virgen de la Candelaria, declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
La jornada empezó con la celebración eucarística en el atrio de la Basílica Menor de la catedral de Puno, a cargo del Nuncio Apostólico del Perú, monseñor Nicola Girasoli, acompañado por el obispo de Puno Jorge Carreón Pavlich.
En los actos religiosos de la fiesta de la
Virgen de la Candelaria, también estuvo presente el titular de Cultura, Alejandro Neyra, quien entregó el reconocimiento de declaratoria como Patrimonio Cultural de la Nación al Carnaval Wapululo de Lampa.
Una vez culminada el acto litúrgico, los centenares de fieles que se dieron cita a la Plaza de Armas de Puno, realizaron una larga cola para
venerar a la Santa Imagen de Puno, llevando consigo ramos de flores.
Mientras que la procesión dio inicio a las 14:00 horas, la venerada imagen cargado en hombres realizó su recorrido por las calles céntricas de la ciudad de Puno, las mismas que lucían coloridas alfombras de pétalos de flores.
A comparación de años anteriores, en toda la ruta de precesión de la
Virgen de la Candelaria, se prepararon alfombras de flores, en las que se observó una infinidad de decorados con detalles alusivos a la
fiesta mayor de Puno, como caretas de morenos y réplicas de la virgen.
Los ingeniosos trabajos de arte estuvieron a cargo de los integrantes de los conjuntos de trajes de luces y autóctonos, además de las instituciones públicas y privadas.
(FIN) JCB/MAO
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Publicado: 3/2/2018