Andina

Conoce las historias de las madres de Cuna Más que se convirtieron en maestras

En el Día del Maestro conozca las historias de las madres del programa Cuna Más que se convirtieron en docentes.

En el Día del Maestro conozca las historias de las madres del programa Cuna Más que se convirtieron en docentes.

13:49 | Lima, jul. 6.

En el Día del Maestro, que se celebra hoy conozcamos las historias de las voluntarias del Programa Nacional Cuna Más del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis). Ellas, gracias a su dedicación al cuidado de los niños, descubrieron su amor por la docencia. Conozcamos sus vivencias.

En el voluntariado de Programa Nacional Cuna Más del Midis, mientras efectuaban el cuidado integral de niños y niñas, cuatro madres de Cajamarca, Cusco, Junín y Huánuco descubrieron su amor por la docencia. Hoy celebramos el Día del Maestro Peruano.

1. 

Se dice que nunca es tarde para aprender. Un gran ejemplo es Sebastiana Aurelio Cristóbal. A sus 50 años está por graduarse como docente de Educación Inicial.


Hace nueve años, Sebastiana se sumó al equipo de madres cuidadoras de Cuna Más, en su Servicio de Cuidado Diurno (SCD). Esta labor le permitió capacitarse sobre atención y cuidados básicos en alimentación, salud, juego y aprendizaje infantil para niñas y niños entre los 6 y 36 meses, empleando su lengua materna, el asháninka.


Para el 2020, su experiencia y buen trato con las familias de los usuarios le mereció ser elegida secretaria del Comité de Gestión Sangani, en el distrito de Mazamari, provincia de Satipo, en la región Junín. Este comité cogestiona la prestación del servicio junto con el programa social.

“Estoy muy orgullosa de mis raíces asháninkas, y de haber logrado que muchas niñas y niños de mi comunidad tuvieran la oportunidad de una primera infancia saludable, segura y feliz”, dice.

Manifiesta que mientras era madre cuidadora, sus cuatro hijos fueron creciendo, por lo que recibieron la atención y cuidados que le enseñaron en Cuna Más. “Por eso, cuando eligieron ser maestros, no me sorprendió tanto: de una u otra forma, todos somos conscientes de cuán determinante es una buena primera infancia para descubrir o despertar tu vocación. Ahora, cuando me gradúe, quizá hasta fundamos un colegio”, comenta entre risas.

Actualmente, ella realiza sus prácticas preprofesionales en el colegio bilingüe Alipio Ponce Vásquez Tsiriari, en su querida Mazamari mientras que se desempeña como secretaria del Comité de Gestión Sangani.

2. 

“Allin punchaw yachachiq” (“¡Buenos días, profesor!”, en quechua). Es la expresión que, frecuentemente, Rosalinda Plácido Jara escucha a las familias que visita como facilitadora del Servicio de Acompañamiento a Familias (SAF), en el centro poblado de Huancapallac, distrito de Quisqui, a 40 minutos de la ciudad de Huánuco.


Rosalinda tiene 29 años y tres hijos: Lyla, de 8 años, Jhosimar, de 6, y Thiago, de 4. Ellos, con mucho orgullo, siempre cuentan a quien esté cerca que, además de facilitadora de las familias de Huancapallac, a las que capacita en prácticas de cuidado infantil en el hogar, su mamá también es una alumna destacada de la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle, donde estudia Educación Inicial.


“Terminé tarde mis estudios escolares por falta de recursos, y no quisiera que mis hijos pasen por lo mismo. De ahí que me esfuerce todos los días para darles un mejor futuro, así como el cariño y los cuidados que, gracias a las capacitaciones de Cuna Más, sé cuán importantes y necesarios son en su desarrollo integral”, afirma.

3. 

Paciente, alegre y con un alto sentido de la justicia, así es Deliz Cortez García, de 35 años. Vive en el centro poblado de Shudal, en Cajamarca, junto a su esposo, el docente Jesús Quirona, y sus dos hijas: Talita Zaraí, de 14 años, y Cris Jamilet, de 7 años.

Por su voluntariado como facilitadora del SAF, Deliz recorre a pie y con buen ánimo varios kilómetros para visitar en sus domicilios a las familias usuarias, con las que conversa sobre buenas prácticas de crianza y cuidado en el hogar, demostrando soltura, confianza y sobre todo cariño, de manera que ellas puedan repetir su ejemplo en el trato diario con sus hijas e hijos.

“Soy un agente de cambio y me siento feliz por ello. Las madres, padres y principales cuidadores que atienden mis sesiones son mi prioridad, por lo que procuro hablarles y enseñarles con mucha paciencia y amor, tal como espero hacer con mis alumnos de auxiliar de Educación Inicial en cuanto termine en unos meses mis estudios, dice.

4. 

En el distrito cusqueño de Kosñipata, desde donde parten las embarcaciones fluviales hacia el Parque Nacional del Manu, la exuberante naturaleza compite con el inmenso amor que Nancy Manqueriata Ramos siente por las niñas y los niños.

Ella es muy conocida en la comunidad nativa de Santa Rosa de Huacaria, porque desde muy joven ya evidenciaba su vocación de maestra, enseñando a pronunciar palabras en su lengua matsigenka a los que llegaban hasta esta parte de la provincia de Paucartambo, en Cusco.


Entonces, para Nancy fue un “paso natural” convertirse, primero, en facilitadora SAF de Cuna Más, y después, en paralelo, reforzar lo aprendido en el programa social con las clases virtuales que actualmente recibe para ser auxiliar de Educación Inicial.

“Todo éxito que podamos tener en la vida parte de una buena infancia. Veo a mis hijos, por ejemplo, sus emociones y sueños, y sé que son capaces de muchos cambios positivos para la comunidad, pero para lograrlo necesitan esa base que solo el amor, la paciencia y una buena crianza otorgan. Ahí es donde quiero contribuir, primero en Santa Rosa, donde mi labor como facilitadora es una de las más enriquecedoras de mi vida. Y luego, como auxiliar de Educación Inicial, llevando este mensaje a toda la provincia”, comenta Nancy, de 32 años.

Efectos positivos


“La labor de los docentes implica esfuerzo personal, compromiso social y mucha voluntad de servicio. Son estos aspectos los que llevan a muchas de nuestras facilitadoras y facilitadores, así como a nuestras madres cuidadoras y madres guía, a iniciar estudios de Educación o carreras técnicas para auxiliar de Educación Inicial, motivados por los efectos positivos que logra su voluntariado con nuestras niñas y niños usuarios”, cuenta Lourdes Sevilla Carnero, directora ejecutiva de Programa Nacional Cuna Más del Midis.

Más en Andina:

(FIN) NDP/MAO

Publicado: 6/7/2022