En un operativo conjunto realizado en el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), los integrantes de la Policía Nacional del Perú y del Ejército Peruano destruyeron 35,000 plantones de marihuana y media tonelada de marihuana seca.
La droga fue hallada gracias a información de inteligencia que alertaba a las autoridades sobre el cultivo de la marihuana (cannabis sativa) en la zona conocida como “hacienda caldera”, en el distrito ayacuchano de Anco, provincia de La Mar, droga que posteriormente era enviada a Lima.
Las fuerzas combinadas del Frente Policial Vraem y del Comando Especial Vraem se dirigieron al lugar en cinco vehículos y encontraron cuatro hectáreas de terreno con los 35,000 plantones aproximadamente.
Posteriormente, los miembros de la Policía Nacional y del Ejército ubicaron ocho ambientes rústicos utilizados como almacenes que contenían los 500 kilos de marihuana seca. La droga fue quemada previa coordinación con un representante del Ministerio Público.
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