La lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, pidió esta noche enfrentar en libertad la investigación en su contra por el caso cócteles, proceso por el cual la fiscalía solicitó la prisión preventiva por 36 meses.
Sostuvo que no tiene miedo de enfrentar las investigación en su contra en el caso de los cócteles que sirvieron para financiar su campaña presidencial el 2011, pero estima que el Ministerio Público que solicitó la prisión preventiva por 36 meses actúa con “desesperación” y con documento que no están completos.
“Se pretende meter a la cárcel a la dirigencia de un partido político señalando de hay organización criminal, rechazo esa afirmación y pido a los otros partidos investigado como organización criminal que se pronuncien, es inaceptable que se criminalice la política”, afirmó.
Como cualquier ciudadana, indicó que corresponde en este caso que se respete el debido proceso en su contra, la presunción de inocencia y el derecho a defenderse para demostrar en el proceso su inocencia.
Consultada por si había identificado al “topo" en su bancada que habría filtrado el chat del grupo denominado "la botica" coordinando acciones en contra del
fiscal José Domingo Pérez, Keiko Fujimori aseguró que no tiene la certeza de quién es el testigo protegido.
“No puedo hacer una afirmación, pero de las declaraciones que hace el testigo que se usó para detenerme ilegalmente hay cosas inventadas”, añadió.
Dijo además que los parlamentarios de su bancada que intervienen en las coordinaciones deben responder por esos comentarios, dado que en esos días ella se encontraba con detención preliminar.
“Agradezco la solidaridad durante la detención ilegal de la militancia, de los dirigentes y de mi familia,
agradezco el mensaje de mi padre, a mi madre por sus palabras y a mis hermanos”, acotó.