El Ministerio de Salud informó que el uso de jeringas vacías en algunos centros de inmunización contra el covid-19 son casos completamente aislados y no obedecen a un sistema de robo de vacunas, descartando que estas puedan terminar en un mercado negro debido a los altos estándares de seguridad con los que se manejan en todo el país.
“Las personas involucradas en estos casos pertenecen a instituciones distintas, sin que se evidencie vínculo ni conexión entre ellas, por lo que se podría inferir que se trata de casos aislados”, detalló Gustavo Martín Rosell de Almeida, viceministro de Salud Pública de dicho portafolio,
Hace algunos días se difundieron diversos videos en los que se mostraba que adultos mayores eran vacunados con jeringas completamente vacías, lo que fue denunciado ante diversos órganos de control del Estado.
Las personas involucradas fueron plenamente identificadas en el vacunatorio de la Universidad Agraria La Molina, el vacunatorio Estadio Chanka de Santa Anita y el vacunatorio del Campo de Marte, en Jesús María.
Llamado a la calma
En conferencia de prensa, el viceministro hizo un llamado a la calma, destacando que en todos los casos denunciados las autoridades del Ministerio se aseguraron de que los adultos mayores recibieran la dosis de vacuna correspondiente.
“El conteo de dosis al inicio de la jornada de vacunación diaria (…) y el conteo final, registrado en el acta de cierre, permiten evidenciar que el total de dosis empleadas coincide con el número de personas vacunadas; por lo tanto, llamamos a la calma y tranquilidad a la ciudadanía, porque todo demuestra que las personas inoculadas en las jornadas de vacunación, a escala nacional, han recibido las dosis adecuadas”, manifestó.
Agregó que de acuerdo a las conclusiones de la investigación realizada por el Minsa el personal sanitario involucrado en estos casos habría incumplido los protocolos de vacunación contra el covid-19, razón por la que el informe presentado hoy será derivado a las instancias donde laboran “con la finalidad de iniciar el proceso administrativo sancionador conforme a la ley”.
El viceministro refirió que la estrategia nacional de inmunización territorial en el Perú “ofrece las garantías a la población de que estos hechos aislados no se repitan más", los cuales, anotó, podrían deberse al cansancio del propio personal sanitario que labora durante largas jornadas.
Mercado negro
Gustavo Martín Rosell descartó que las vacunas que distribuye el Estado puedan llegar a un posible mercado negro.
Fue en enfático en destacar que los centros de vacunación están siendo supervisados de manera permanente por las autoridades del Ministerio de Salud, Susalud, la Defensoría del Pueblo y la Fiscalía.
“Nosotros no tenemos ningún indicio de mercado negro y tenemos la seguridad de esto. La vacuna va con resguardo policial, tenemos policías dentro de los centros de vacunación y gente que está observando lo que pasa en cada centro, no es gente encubierta, pero sí supervisores que vigilan lo que se hace con la vacuna”.
Indicó que es muy difícil que las vacunas del Ministerio de Salud lleguen al mercado negro, porque hasta ahora no existe ninguna pérdida de frascos, ni siquiera vacíos.
El viceministro adelantó que se buscará mejorar el proceso de inmunización para reducir las colas y esperas, esto mediante la apertura de más centros de vacunación en diversos lugares, como el Campo de Marte, donde aconteció una de las denuncias.
“Pero también se abrirán nuevos puntos de vacunación en San Juan de Lurigancho, San Martín de Porres, donde vamos a descargar un poco la demanda que está surgiendo estos fines de semana. Hay que entender que cada vez que bajamos la edad hay mayor carga para aplicar vacunas”, indicó.