El Gobierno estadounidense no intentará un acercamiento con el régimen venezolano de Nicolás Maduro si sigue adelante con la convocatoria de elecciones parlamentarias y si no se compromete a un Gobierno de transición, por lo que seguirá abundando en la vía de las sanciones, entre ellas al crítico sector petrolero.
El representante especial para Venezuela del Departamento de Estado, Elliott Abrams, negó este martes en una teleconferencia que la Administración del presidente Donald Trump tenga en mente realizar acercamientos con el Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
"Solo tenemos una cosa que queremos discutir: los detalles de su salida del poder", señaló Abrams. En entrevista con Efe este mes, el que fuera asesor de seguridad de Trump John Bolton aseguró que si Trump sale reelegido en las elecciones generales de noviembre intentará reunirse con Maduro, algo que según él el mandatario republicano solía plantear.
Abrams no quiso entrar a qué tipo de contactos tienen con algunas facciones desafectas del Ejército venezolano para promover la salida de Maduro, porque "para prevenir esa actividad hay un par de miles de espías cubanos (en Venezuela), por lo que cuanto menos revele mejor".
El diplomático estadounidense aseguró que "el Ejército venezolano jugará un importante rol en el futuro de Venezuela ya que tiene muchos problemas de seguridad (...). Venezuela necesita un ejército modernizado que trabaje con un Gobierno civil democrático".
Abrams aseguró que lo que toda discusión con el régimen de Maduro se debe dar con el compromiso previo de un breve Gobierno de transición, elecciones libres y "restauración de la democracia" venezolana, por lo que la convocatoria de elecciones parlamentarias por parte de la Comisión Nacional Electoral (CNE) en diciembre no se ajusta a ese marco.
Tampoco quiso dar detalles sobre si Estados Unidos buscará sancionar la práctica por la que algunos países intercambian diésel o gasolina por crudo para evitar las sanciones contra el sector petrolero venezolano. Empresas como la española Repsol, la italiana Eni o la india Reliance han realizado este tipo de intercambios con Petróleos de Venezuela, según fuentes de la industria.
"Nuestra política es negarle ingresos al régimen de Maduro y aplicar presiones en los sectores del oro y del crudo, pero no voy a entrar a discutir posibles futuros", indicó Abrams, que no quiso adelantar posibles nuevas sanciones. Asimismo, aseguró que no considera que la política de la Administración Trump con Venezuela haya fracasado.
"Creemos que lo correcto es apoyar a los venezolanos para que restauren la democracia y vamos a continuar nuestra política de sanciones y de actividad diplomática", añadió el representante gubernamental.
En cuanto a una posible mediación de Noruega en Venezuela, Abrams se mostró cauto y aseguró que sin un compromiso a una "transición democrática seria" no hay posibilidades de avance y es algo que Caracas nunca ha considerado "una cuestión a negociar".
Agencia Efe: todos los derechos son reservados. Está prohibido todo tipo de reproducción sin la autorización previa y por escrito de la Agencia Efe.
Más en Andina