19:46 | Chiclayo set. 19.
El osezno que nació, hace más de dos meses, en el área de conservación privada de Chaparrí, ubicado en el distrito de Chongoyape, región Lambayeque, dejó su cueva e inicia por primera vez y con evidencia la interacción en campo abierto con su madre llamada osa Lola.
Estos momentos fueron captados en un impresionante video que muestra a la osa de anteojos Lola acompañando a su cachorro por las áreas boscosas del centro de rescate y reintroducción del área de conservación privada de Chaparrí.
Hace dos meses nació un osezno en este complejo ecológico lambayecano, considerado como uno de los grandes logros del Programa de Conservación y Rescate de Osos de Anteojos, recordó el defensor de la citada área natural, Javier Ruiz.
Los osos Lola y Tongo son los padres del hermoso osezno. “Los guardaparques lo descubrieron, cuando evidenciaron que la osa Lola no salía de su guarida y al escuchar unos ruidos diferentes. Recién hoy el osezno ha comenzado a salir de la osera haciendo pequeños recorridos, siempre protegido por Lola. Este nacimiento nos recuerda la importancia del "milagro Chaparrí" para la conservación de las especies emblemáticas del bosque seco”, aseveró Ruiz.
Recordó que el Programa de Conservación y Rescate de Osos tiene como propósito favorecer la investigación y la educación ambiental en torno a esta especie que convive con especies en peligro como la pava aliblanca, siendo uno de los principales atractivos naturales en el norte del país.
También remarcó que los comuneros expresaron su alegría por la llegada del nuevo ejemplar que alberga la reserva ecológica de Chaparrí, cuya especie no solo se ha retratado en una moneda, sino que también fue la mascota oficial del reciente Campeonato Mundial de Atletismo sub-20 Lima 2024, en el que participaron 1,700 atletas.
Chaparrí es el nombre de la montaña que resguarda esta reserva ubicada en Lambayeque y además un lugar sagrado para la cultura Mochica.
En sus alrededores crece un bosque seco único en el Perú, que camufla restos de culturas milenarias como tallados en piedra o construcciones de adobe. Entre sus árboles y restos se pueden ver zorros, roedores, colibríes, guanacos, pitajos de Tumbes y cóndores andinos que gozan de la paz y tranquilidad que llegó a la zona gracias a estos implacables guardianes que vieron en la conservación de su territorio, la mejor vía para desarrollarse.
Más de 280 especies de aves, 15 de mamíferos, 23 de reptiles y 5 de anfibios conviven con esta comunidad que puso la vida por delante de todo en su más de 34 mil hectáreas. Es así, que desde 2001 dejaron atrás la deforestación de esta área y se dedicaron a promover el turismo responsable.
A la fecha, Chaparrí se ha convertido en un ejemplo de conservación en el país, valorado por los cientos de visitantes que llegan de todas partes del mundo para maravillarse en este bosque. Con los ingresos del turismo ayudan al desarrollo del pueblo, repotenciando sus escuelas, postas y demás servicios.
Este rincón de Lambayeque es considerado una de las principales reservas naturales del norte del país. Es un importante lugar de nuestro país para conocer de cerca a los osos de anteojos, ya que una parte de su población en Chaparrí vive en semicautiverio, y también a las pavas aliblancas, que se creía extintas.
(FIN) SDC/TMC
Published: 9/19/2024