Renato Tapia, que el domingo dejó de pertenecer al Celta de Vigo de España tras una etapa de cuatro temporadas, se despidió del club que le permitió cumplir su sueño de jugar en la liga española.
“Con el corazón en la mano, con mucha pena pero a la vez con mucha gratitud, llegó la hora de despedirme del club que me abrió las puertas para poder cumplir uno de mis sueños, jugar en LaLiga”, señaló el mediocentro en su carta de despedida.
El “cabezón” llegó al Celta en el verano de 2020 procedente del Feyenoord. Tras un primer año brillante en Balaídos, Tapia ha ido perdiendo protagonismo en el equipo, con el que ha jugado un total de 120 partidos, 21 de ellos en esta última temporada.
“Me llevo los mejores recuerdos de todas las temporadas en situaciones adversas y positivas. Fueron años de mucho aprendizaje, de mucho crecimiento tanto en lo deportivo como en lo personal con el grupo”, indicó.
El futbolista peruano, que renunció a jugar con su selección la Copa América de Estados Unidos por miedo a sufrir una lesión grave al encontrarse todavía sin equipo, desea "lo mejor" a sus ya excompañeros en el Celta, y lamenta “no haber podido” despedirse de la afición celeste.
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(FIN) EFE/JSO
Published: 7/1/2024