Por Miguel De la VegaEl avance de la economía global depende de las operaciones de exportación e importación y, por ello, el menor tiempo para realizarlas resulta clave para el crecimiento del país.
Así lo sostuvo el superintendente nacional adjunto de aduanas de la Sunat, Rafael García, en declaraciones al Diario Oficial El Peruano, pocos días después de confirmarse el acuerdo comercial fase uno entre Estados Unidos y China que atenúa la guerra comercial entre ambas potencias.
¿Qué porcentaje de las operaciones aduaneras ya están digitalizadas a la fecha?
–La aduana tuvo su primera revolución tecnológica en 1992 y desde entonces las operaciones matrices ya eran electrónicas, pero ahora estamos prácticamente en el 100% para las operaciones de importación y exportación.
Sin embargo, el usuario debe tener su documentación lista en caso de algún tema de revisión extraordinaria o de fiscalización posterior, pero en general, todo el sistema transaccional entre el usuario y la aduana es digital.
El mandato electrónico, que es la autorización del importador o exportador a un agente de aduanas para el despacho de las mercancías, será obligatorio a partir del 1 de enero del 2020.
–¿Cómo deciden el modelo de transformación digital que se implementará?
–En realidad, en las aduanas hay poco espacio para inventar, porque la Organización Mundial de Aduanas (OMA), que es como las Naciones Unidas Aduaneras, tiene 183 miembros y se reúne durante el año para distintos temas referidos a seguridad y armonización, entre otros. Entonces la OMA elabora el compendio de las mejores prácticas a escala mundial, como la seguridad, a las cuales hay que seguir en sus grandes lineamientos.
En segundo lugar, tenemos algunos marcos, como el Acuerdo de Facilitación de Comercio, derivado de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que es una suerte de resumen del Convenio de Kyoto revisado, el cual contiene las mejores prácticas aduaneras del mundo. En tercer lugar, están los acuerdos de apertura comercial que se han firmado, y, afortunadamente, tenemos una cartera de destino diversificada para nuestras exportaciones, esta es una ventaja del Perú.
–El sistema de aduanas tiene un componente de transparencia. ¿Qué porcentaje es abierto al público?
–La ley establece algunos puntos de restricción para compartir información comercial, por ejemplo, quién es tu proveedor, cuanto le compras o vendes. Salvo tres o cuatro cosas de las operaciones de comercio exterior, todo lo demás está publicado en nuestra web. Es una ventaja que la OMA aprecia de nuestro modelo. No hay muchos países que tengan tanta transparencia con su información comercial como el Perú.
–¿La transformación digital en cuánto tiempo ha reducido las operaciones de comercio exterior?
– El tiempo total promedio de liberación de las mercancías, una vez que llegaban al puerto o aeropuerto en el 2014, tomaba 139 horas, a noviembre del 2019 se redujo a 79.2 horas. La meta para el 2021 es alcanzar las 48 horas para las operaciones de importación y exportación.
–¿En costos?
–Ha habido una reducción de los costos para los importadores, ellos deben tener el cálculo, porque ahora gastan menos en almacén. Asimismo, los operadores económicos autorizados ya no necesitan establecer garantías reales, ahora funcionan con garantía nominal, cuyo costo financiero es inferior.
–¿Qué mejoras vienen para el 2020, qué metas tienen?
–Primero queremos terminar con el desarrollo del programa FAST (Facilitación Aduanera, Seguridad y Transparencia), luego queremos empezar a trabajar un modelamiento de los procesos de control que corresponde a la trazabilidad de la carga.
Perspectivas alentadoras
Rafael García refiere que el reciente consenso entre Estados Unidos y China respecto al texto del acuerdo comercial de la fase uno, que disminuye la tensión comercial entre ambas potencias, “son buenas noticias” para el Perú.
“Al ponerse de acuerdo se apaciguarán las expectativas en los mercados y ello probablemente tendrá un impacto positivo en el precio de nuestros commodities, básicamente el cobre, también el oro y la plata”, manifestó.
Destacó que, a pesar del enfrentamiento entre ambas economías, el volumen de comercio de consumo entre el Perú y China no disminuyó, en tanto las exportaciones de minerales sí se afectaron por una reducción de la demanda.
De otro lado, García también enfatizó que la micro y pequeña empresa (mype) también tiene oportunidades de participar del comercio exterior. “Para ello, Aduanas cuenta con los programas Importa Fácil y Exporta Fácil, que son sencillos y fáciles de usar”.
Por ello, invitó a los emprendedores a utilizarlos para facilitar el desarrollo de sus negocios.
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(FIN) SDD
Published: 12/17/2019