La norma técnica que fija las reglas para el trabajo remoto de los profesores de la escuela pública, aprobada el 2 de abril por la Resolución Viceministerial N°088-2020 del sector Educación, debe convertirse en un reglamento técnico para que su cumplimiento sea obligatorio también en los colegios privados.
Así lo propuso el presidente de la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (Aspec), Crisólogo Cáceres, al resaltar al alto nivel de descontento que muestran los padres de familia respecto a las clases virtuales que reciben sus hijos en el contexto de la cuarentena por el covid-19.
Son los dos grandes hallazgos de la encuesta: la desazón con las clases virtuales y el descontento con el monto de las pensiones, debido a que las condiciones del servicio cambiaron con la distancia social, la inamovilidad y la no asistencia a los colegios por la pandemia, acotó el titular de Aspec.
Métodos disímiles
La norma técnica aprobada por la Resolución 088-2020 determina cuáles son las características de la educación a distancia, cuántas horas deben dedicar los maestros al dictado de clases, cómo deben ser los contenidos por materia, cómo será el proceso de evaluación en los colegios públicos, añadió.
Sin embargo, por tratarse precisamente de una norma técnica, rige solo para la escuela pública. “Pero si se la convierte en un reglamento técnico, tiene que cumplirse de manera obligatoria también en la escuela privada”, enfatizó Cáceres en el programa “Andina al Día” de la agencia Andina.
“Como no hay una regla específica, cada colegio está dictando las clases virtuales de la forma que mejor le parece –comentó el vocero de Aspec– y, por eso, tenemos métodos tan disimiles que generan confusión, desorden e insatisfacción de los padres”.
Pagar lo correcto
En cuanto al monto de las pensiones y la intención de las escuelas privadas de mantenerlo, Cáceres comentó que los padres “están dispuestos a pagar”, pero esperan asumir “lo que es correcto”.
El presidente de Aspec dijo que algunos colegios envían un video de tres minutos y, a partir de ese material, dejan tareas; otros dan clases de 15 minutos a la semana para grupos de diez niños, lo cual da un promedio de un minuto y medio de clase por alumno; y otros más envían sesiones online para niños de 3 años del nivel preescolar. “Todo eso es apenas una muestra de los diversos hechos que generan el malestar de los padres de familia”.
Como organización de defensa del consumidor, reconocemos que hay maestros que están dando lo mejor de sí en esta situación tan adversa, pero los argumentos de los colegios privados que sostienen que el 80% de la pensión va al pago de los sueldos de los docentes no se ajusta a la realidad, enfatizó.
Salvo que los colegios lo demuestren con una estructura de costos, nos reservamos el derecho de creerles, comentó Cáceres. “Nosotros no creemos que el costo de una
clase virtual sea el mismo que el de una clase presencial”.
No polarizar la situación
Respecto al futuro inmediato, Cáceres pidió a los directores de colegios privados no polarizar más la situación, porque se corren el riesgo de una gran moratoria de pagos a finales de abril.
“Estamos asomándonos a un abismo negro”, observó. Si los colegios privados no cambian de actitud, la morosidad se elevará de manera ostensible este año. “Queremos pagar, pero no la pensión completa porque no lo amerita”, reiteró el directivo de Aspec, al plantear un diálogo transparente entre directores y padres de familia.
“Además, no es que los padres quieran eludir sus obligaciones, sino que hoy no tienen con qué pagar –puntualizó–; los colegios no pueden permanecer en una dimensión ajena a esta realidad”.
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(FIN) CCH
Published: 4/17/2020