03:15 | Trujillo, feb. 2.
La fe y devoción mariana ancló en Huanchaco hace 486 años. El balneario más icónico de la provincia de Trujillo era entonces un reducto Chimú, un poblado con los últimos testigos de lo que alguna vez fue una poderosa cultura del antiguo Perú que dominó el norte del país.
Fue Fray Alonso de Escarcena, un misionero franciscano que participó en el proceso de conquista, quien solicitó al rey Carlos V de España que le enviara una imagen de la Virgen Candelaria del Socorro para que sea la madre de Cristo quien lo ayudara a atraer al camino de la iglesia católica a los antiguos pescadores chimú.
Cada año los huanchaqueros renuevan su fe venerando a la Virgen Candelaria del Socorro con una serie de actividades religiosas, sociales y artísticas, que convirtieron a la parroquia de Huanchaco en un santuario dedicado a la Virgen María.
Aún ahora existen varias posturas respecto al día exacto que la venerada imagen desembarcó en la playa de Huancarute, lo que se conoce hoy como Huanchaco, pero sus fieles están convencidos que fue el 2 de febrero, afirma Orlando Flores Rodríguez, presidente de la Hermandad Virgen Candelaria del Socorro.
“La Virgen Candelaria del Socorro es la primera imagen mariana llegada al Perú. Lo hizo el 2 de febrero de 1537 y desde allí empezó una tradición mariana que está por cumplir 500 años”, resaltó.
Flores refiere que con el pasar de los años la devoción a la Virgen Candelaria del Socorro ha crecido y prueba de ello es que la hermandad hoy en día agrupa a muchos más hermanos, que han crecido en gozo con las actividades en honor a la madre de Cristo.
Y es que Flores también viene de una generación de fe en la venerada imagen, pues su padre, don Armando Flores también formó parte de la hermandad que ahora él preside. Antes de ello participó de la danza de los diablitos, que danzan en honor a la madre de Cristo.
Renovación de fe
El párroco del Santuario Nuestra Señora Candelaria del Socorro, Luis Bernardo Sánchez Achútegui, aseveró que la importancia de la virgen para los fieles radica en la renovación de la fe en el evangelio de nuestro señor Jesucristo, en su palabra que tanto necesitamos en lo que está pasando en el país.
El sacerdote señaló que cuando se pide con devoción y entrega, la virgen, mediante el poder que le brinda su hijo puede ayudarnos a encontrar la fe que todo el pueblo peruano busca en estos momentos.
Patrimonio Inmaterial
Cada cinco años, los pobladores de Huanchaco celebran la bajada quinquenal, donde su recorrido procesional dura un mes y recorre todas las pascanas (iglesias) e incluye la visita a la ciudad de Trujillo.
Esta festividad fue declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial el 8 de diciembre del 2021, pues está llena de una serie de manifestaciones culturales y matices que la hacen una celebración única. La próxima bajada será en el 2025.
Actividades
El presidente de la hermandad cuenta que las actividades empezaron el 22 de enero y se extenderán hasta el 4 de enero, pero las actividades más importantes empiezan el 29 de enero con la salida de la imagen del Santuario hacia el cerrito La Virgen.
“Cuanta la leyenda que en dicho cerro se veía a la virgen lavando la ropita al niño Jesús y a veces se le veía bordando o jugando con él, es por eso que en esta celebración la llevamos en su litera como una reina”, apuntó.
Hoy miércoles 1 de febrero a las 13:00 horas se inicia el primer recorrido procesional por las calles de Huanchaco y se tiene prevista su llegada al muelle artesanal de Huanchaco a las 18:00 horas, donde se ha preparado un estrado especial para la misa de víspera y recibir el homenaje de las principales autoridades del distrito.
Luego de eso hay fuegos artificiales y la verbena artística con los principales grupos de música de la región.
Mañana jueves, el día central, a las 10:00 horas es la misa de fiesta y al mediodía se inicia el segundo recorrido procesional para que continúe recibiendo los homenajes de la población; se tiene prevista el retorno a su santuario a las 23:00 horas.
Al día siguiente el templo estará abierto para las personas que quieran venerarla. La celebración termina el sábado 4 de febrero con el baile social hasta el siguiente año.
La veneración a la virgen es también una oportunidad que aprovechan muchos fieles para disfrutar de
Huanchaco y otros de sus encantos como los caballitos de totora, el muelle artesanal, la pesca a cordel y disfrutar de una exquisita gastronomía a base de pescados, masricos y dulces.
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(FIN) LPZ/MAO
JRA
Publicado: 2/2/2023