Andina

Conoce a “Guerreros por el turismo”, emprendedores que se reinventan para recibir turistas

Gracias a iniciativa liderada por el PNUD y ONG Proa con apoyo del Mincetur y del sector privado

Una de las experiencias que muestran esa nueva visión del turismo resiliente en un contexto como el que marca la pandemia, es el protagonizado por emprendedoras y emprendedores turísticos de la región Puno, gracias a la iniciativa “Guerreros por el turismo”. ANDINA/Difusión

Una de las experiencias que muestran esa nueva visión del turismo resiliente en un contexto como el que marca la pandemia, es el protagonizado por emprendedoras y emprendedores turísticos de la región Puno, gracias a la iniciativa “Guerreros por el turismo”. ANDINA/Difusión

03:45 | Puno, abr. 21.

Si bien el impacto económico de la pandemia de la covid-19 en el turismo es muy severo, la respuesta de muchos emprendedores peruanos a esta crisis busca una recuperación basada en la capacitación e implementación de nuevos protocolos para garantizar una experiencia segura e inolvidable a los visitantes que poco a poco retornan a los diversos destinos.

Una de las experiencias que muestran esa nueva visión del turismo resiliente en un contexto como el que marca la pandemia, es el protagonizado por emprendedoras y emprendedores turísticos de la región Puno, gracias a la iniciativa “Guerreros por el turismo”.


“Guerreros por el turismo” es una iniciativa de voluntariado liderada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Asociación Civil Voluntades Proa, con el apoyo de la Estrategia de Turismo Comunitario del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) y siete organizaciones del sector público y privado.

Puno es, junto con Cusco y Arequipa, uno de los destinos preferidos por los turistas nacionales y extranjeros, al albergar una amplia gama de atractivos turísticos entre los que destaca el imponente y milenario lago Titicaca con sus islas flotantes en las que viven comunidades aimaras herederas de una cultura ancestral y que son la mejor expresión del turismo rural comunitario en el Perú.

Turismo sostenible en tiempos de pandemia


En un reportaje titulado “Guerreros por el turismo”, publicado en el portal institucional del PNUD se explica que esta iniciativa brinda información oportuna para las y los emprendedores y sus familias. 

A través de asesorías telefónicas, durante cuatro semanas, 116 voluntarios y voluntarias llegaron a los emprendimientos con datos sobre la covid-19, su impacto en el turismo a nivel nacional y regional y en los micronegocios, y cómo crear la sostenibilidad en los emprendimientos turísticos.


Estas capacitaciones han sido informativas, pero también han servido como soporte emocional a emprendedores que se enfrentan a la incertidumbre de la pandemia. Los módulos abarcan temas como lidiar con el posible rechazo a la actividad turística, qué es el coronavirus y cómo cuidarse uno y al resto de la familia, y ejemplos de éxito de emprendimientos vecinos, mostrando que es posible sobreponerse a la crisis.


Historias como las de los emprendedores turísticos Doris Quispe Pacompia, Albano Ascencio Jahuira y Asunción Quispe Quispe, permiten apreciar que sí es posible reactivar su economía de manera segura y sostenible si se incorporan a la gestión turística el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad, la innovación y la satisfacción del visitante tratando de superar sus expectativas con una experiencia inolvidable.

Para Doris Quispe Pacompia, en la isla de Amantaní, un día normal consistía en recibir a los visitantes en el puerto, hacerles conocer la comunidad, costumbres y bailes, “hasta que sus corazones estén contentos”. Ahora, es distinto. Ya no llegan los visitantes al puerto. Ya no hay, por una noche, un miembro más en la familia.

Y aunque emociona la reapertura, Doris sabe que hay que hacerla siguiendo pasos importantes: el protocolo de bioseguridad para ella y sus visitantes. Con las capacitaciones de “Guerreros por el turismo”, ahora ella enumera los cuidados que deben tener para evitar posibles contagios porque la enfermedad sigue siendo el mayor de los miedos: lavado de manos constante, alcohol en gel a disposición de todos, desinfección de los espacios, entre otras medidas.


Según el Mincetur, luego de la cuarentena, 8 de cada 10 turistas que viajen por vacaciones elegirían un destino dentro del Perú; priorizando aquellos donde puedan sentir seguridad ante la pandemia. Por ello, la implementación de los protocolos que Doris está realizando en su emprendimiento es clave. “El turismo me beneficia”, dice. “Puedo educar a mi hijo. Y no me beneficia solo a mí, debería beneficiar a toda la comunidad”.

Para hacer de la isla y su emprendimiento más atractivos a nuevos visitantes, en beneficio suyo y su comunidad, ella continúa trabajando en la bioseguridad, con esperanza de que, con organización, más mujeres se puedan sumar y capacitarse, y sean: “algunas señoras emprendedoras, como yo.”   

Con las nuevas restricciones que responden a la segunda ola de la pandemia, es más importante que nunca tomar medidas para fortalecer el turismo ahora. Así, cuando se liberen nuevamente actividades y haya mayor libertad en los traslados, las y los emprendedores de todo el país podrán reactivar su economía de manera segura y sostenible.


De ello es consciente Asunción Quispe Quispe, residente de Atuncolla, un importante destino turístico ubicado a 30 minutos de la ciudad de Puno y que cuenta en su territorio al sitio arqueológico de Sillustani, preferida por turistas nacionales y extranjeros. “Tenemos muchas ideas hacia adelante, esperanza y muchas ansias para poder trabajar”, manifiesta.

Considera que iniciativas como “Guerreros por el turismo” no deberían quedarse en una sola entrega, y que las capacitaciones y la asesoría deberían ser constantes para poder fortalecer los emprendimientos y a emprendedores. 

Esa es una característica que define a todos quienes han participado: quieren seguir aprendiendo, capacitándose para poder ofrecer cada vez servicios de mejor calidad y experiencias más enriquecedoras para sus visitantes, siempre con seguridad para todos.

Iniciativas como “Guerreros por el turismo” tienen el potencial de replicarse a nivel nacional para beneficiar a más emprendedores y poder reactivar al sector. Si se gestiona de manera responsable, el turismo puede salir de esta emergencia más fuerte y continuar creando oportunidades y beneficiando a millones de personas en todo el territorio peruano. 

Rendirse no es una opción


“Si nosotros no luchamos, si el guerrero se rinde, ¿a dónde nos vamos?”, dice Albano Ascencio Jahuira recibe a los visitantes como familia. “Es como si mi hermano, mi primo, mi tío, están llegando de lejos”, dice. 


“Entonces yo lo invito y para mí es una satisfacción tener un visitante. Es lo que amo”, sostiene  Albano, uno de los 88 emprendedores, de 40 organizaciones de base comunitaria, que participaron de las capacitaciones telefónicas de “Guerreros por el turismo” en Puno.

En su hospedaje frente al lago, se especializa en turismo rural comunitario: muestra a los y las visitantes cómo es la vida en Luquina Chico, centro poblado de la península de Chucuito, a orillas del Lago Titicaca, con los saberes ancestrales de su comunidad. 

Este tipo de experiencias va cobrando importancia y vigencia con la pandemia. Los turistas están apostando cada vez más por actividades al aire libre, orientadas a la sostenibilidad, y en espacios reducidos con poco aforo y poco contacto con grupos grandes. 


Desde el 2019 hasta finales del 2020, la intención de los visitantes de realizar turismo comunitario ha incrementado en 3%, y la tendencia es que esta siga creciendo, según el Mincetur.

Estas son buenas noticias para Albano, que se ha sentido inseguro con los cambios que se vienen dando a raíz de la crisis pandémica. La falta de visitantes deja un espacio vacío en sus actividades y comenta que se ha sentido aburrido a veces, pero también temeroso: la pandemia es una amenaza constante para la comunidad, que está compuesta principalmente por personas mayores. El regreso de las visitas implica una reactivación de sus actividades y su economía y, al mismo tiempo, el riesgo de la llegada de la enfermedad a Luquina Chico.

“Tenemos que adaptarnos y con esta información yo creo que ya estamos preparando el cambio: con los protocolos, la seguridad. Estamos viendo con la familia cómo vamos a actuar, en qué momentos vamos a intercambiar. Queremos sumar a más compañeros, que se puedan informar y seguir luchando por el turismo”, finaliza convencido de que sí es posible reactivar el turismo con este nuevo enfoque sin perder de vista la sostenibilidad.

(FIN) NDP/LZD/MAO
JRA

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Publicado: 21/4/2021