18:07 | Lima, abr. 08 (ANDINA).
En Perú, la mayoría de calzados, en especial los dedicados al mercado escolar, ha sido fabricado o comercializado por marcas nacionales o transnacionales que incumplen las normas técnicas peruanas, reveló hoy un estudio de la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (Aspec).
Esa entidad estimó que más de 3.5 millones de pares de calzados escolares fueron confeccionados con serias deficiencias en el material empleado y sin cumplir con las especificaciones técnicas como la calidad del cuero, grosor de la suela o la resistencia a la fricción con el pavimento.
En total, en el mercado peruano se comercializan más de 56 millones de pares de calzados entre zapatos, zapatillas, sandalias, etcétera, señaló la directora del Centro de Innovación Tecnológica del Cuero y del Calzado (Citecal), Adriana Ríos.
El estudio, dirigido por Aspec, se realizó en los laboratorios de Citecal, sobre una muestra de 20 marcas nacionales y transnacionales, a las cuales se sometió a todo tipo de pruebas para comprobar su resistencia a la flexión y el desgarro, la permeabilidad, solidez, el espesor de la planta, la seguridad y duración.
Sólo el 10 por ciento de las marcas investigadas (Lumberjack y Hush Puppies), resultaron las mejores calificadas; y una de las peores calificadas fue la marca Michael, sostuvo el presidente de Aspec, Jaime Delgado.
“Si bien la norma no es de carácter obligatorio, es una buena referencia para establecer los parámetros de calidad de este tipo de calzado.”
Asimismo, afirmó que la mayoría de marcas no cumple con indicar los materiales empleados en su fabricación mediante un rotulado. “Esta disposición es obligatoria para todos los fabricantes de calzado y debería consignar los materiales utilizados para la capellada (parte superior), la planta, el forro y la plantilla.”
Indicó que en estos casos, Aspec denunciará a las marcas infractoras ante el Indecopi por omitir esa disposición obligatoria.
Precisó que uno de los aspectos más preocupantes es que 13 de las 20 marcas analizadas no cumplían con el espesor reglamentario de la planta, arriesgando la seguridad de los pies del niño, ya que puede introducirse alguna punta filuda. La norma establece que el grosor mínimo debe ser de cuatro milímetros, pero hay marcas que tienen apenas 2.24 milímetros, es decir, casi la mitad de lo reglamentario.
Por su parte, Adriana Ríos manifestó que el estudio realizado para el calzado escolar se podía extrapolar a la totalidad del calzado utilizado en el país. “Las fábricas no emplean los materiales adecuados y este estudio tiene la virtud de revelar esas falencias, para que las propias fábricas y marcas mejoren la calidad de sus productos.”
(FIN) WCS/RRC
GRM
Publicado: 8/4/2009