El gobierno mexicano agradeció este miércoles al magnate de las telecomunicaciones Carlos Slim por financiar la producción, en México y Argentina, de una vacuna contra la covid-19 del laboratorio AstraZeneca que será destinada al mercado latinoamericano, excepto Brasil.
Luego de que en Buenos Aires el presidente Alberto Fernández diera a conocer este acuerdo, el canciller Marcelo Ebrard ratificó la participación de México, si bien será este jueves cuando brinden más detalles.
"Mañana daremos a conocer con el Secretario de Salud los acuerdos alcanzados para producir en México y Argentina, con apoyo crucial de la Fundación Carlos Slim", escribió Ebrard en Twitter.
Un comunicado de la oficina en México de AstraZeneca, que trabaja en alianza con la Universidad de Oxford, explicó que con este acuerdo la producción de la vacuna para América Latina será "sin beneficio económico" para el laboratorio.
El mexicano Slim es el dueño de la telefónica América Móvil, que opera en 17 países de América Latina, incluida Argentina.
La revista especializada Forbes lo coloca en el puesto 12 de los más ricos del mundo 2020 con una fortuna estimada en 52.400 millones de dólares.
Precios razonables
La Fundación Carlos Slim, citada en el comunicado de AstraZeneca, expresó su determinación de "colaborar en combatir esta inédita pandemia que tiene gran impacto en la salud, la economía y el empleo", al tiempo que lamentó la pérdida de vidas humanas.
Con el financiamiento de la Fundación Slim, explicó Fernández, se conseguiría una vacuna "a precios más razonables", de entre 3 y 4 dólares.
De concluir con éxito los ensayos clínicos, se espera que las primeras dosis se empiecen a distribuir en el primer semestre de 2021.
Ebrard anunció el miércoles que México firmó acuerdos con la estadounidense Janssen Pharmaceuticals y las chinas CanSino Biologics y Walvax Biotechnology para participar en pruebas clínicas de una eventual vacuna a partir de septiembre.
Días atrás, México acordó sumarse también a los ensayos del laboratorio francés Sanofi. México es el tercer país, detrás de Estados Unidos y Brasil, con el mayor número de fallecimientos con 53.929, mientras que los csos confirmados suman 492.522, según el reporte de este miércoles.