Con un helicóptero de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) se inició la evacuación de pobladores afectados y damnificados por la crecida del caudal de los ríos La Leche y Motupe debido a las intensas lluvias que caen en la región Lambayeque, en el norte peruano.
Personal de tropa la Sétima Brigada de Infantería de Lambayeque apoya en el traslado de las familias que quedaron aisladas por la crecida de los ríos en los caseríos ubicados en la parte baja de los distritos de Pacora y Mórrope.
Este apoyo fue coordinado por el gobernador de Lambayeque, Jorge Pérez, con el comando de la Sétima Brigada de Infantería, la FAP y el jefe del Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER), general EP (r) Walter Bracamonte Merino.
Río Motupe amenaza
Asimismo, personal del Ejército del Perú empezó la evacuación de unas 150 personas que viven en el caserío San Luis del distrito de Pacora, pues el río Motupe amenaza con desbordarse y inundar esta zona.
Más temprano, el alcalde de Pacora, José Sipión, llegó hasta el lugar acompañado por el representante de la Sétima Brigada de Infantería, coronel EP Wenceslao Rengifo que exhortó a la población a evacuar la zona, pues existe un alto riesgo de desborde del río y posterior inundación de viviendas.
“Los invito a que evacúen porque después puede haber consecuencias lamentables. Tengo un vehículo donde personal de tropa les ayudará a evacuar antes de que ustedes sean perjudicados por el [eventual desborde del] río. Todas las autoridades están a su disposición. Comiencen a empacar sus cosas”, aseguró.
Traslado y ayuda humanitaria
Sipión indicó a los moradores que serán trasladados hacia el local Indoamericano, donde existen carpas y colchones para pernoctar; además de recibir ayuda humanitaria (alimentos, abrigo) para el tiempo que dure la emergencia y luego puedan retornar a sus casas.
Además, les manifestó que pueden trasladar a sus animales para que en una chacra ubicada en Pacora puedan dejarlos de manera momentánea.
De forma simultánea, maquinaria pesada refuerza las márgenes del río a fin de amenguar su desborde.
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