Moscú iniciará el desconfinamiento de sus 12 millones de habitantes el 1 de junio, aunque de forma gradual y experimental, después de que los casos de la covid-19 se redujeran a la mitad en relación al pico de la pandemia en este país.
"La situación en Moscú y, en general en el país, efectivamente se está estabilizando. En relación con el pico de principios de mayo, el número de casos de coronavirus en la capital se ha reducido a la mitad, al tiempo que el número de test no deja de aumentar", dijo Putin al reunirse con el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin.
En un encuentro retransmitido en directo por la televisión, Putin alabó la gestión de Sobianin, quien optó por introducir a finales de marzo una cuarentena de obligatorio cumplimiento hasta el 31 de mayo, después de que el presidente se limitara a conceder vacaciones retribuidas a los rusos, que concluyeron el pasado 12 de mayo.
Desconfinamiento experimental
Con respecto al esperado desconfinamiento, Sobianin volvió a optar hoy por la precaución y adelantó que, aunque son muchos los moscovitas que desean salir de sus casas, la desescalada se efectuará "de manera experimental" y por horarios. "Lo haremos en base a un horario en el que los ciudadanos que vivan en una u otra casa podrán salir a pasear. Y a la semana siguiente ya se verá como evoluciona la situación", explicó.
Sobianin justificó su conservadurismo por el hecho de que si se permite a toda la población salir a los patios y parques, las calles de la capital rusa se llenarán de gente "como si fuera la manifestación del primero de mayo", en alusión al día de los trabajadores.
Inmediatamente después, algunas fuentes precisaron que, al menos, la próxima semana los moscovitas no podrán pasear todos los días, sino tres veces a la semana y según unos horarios muy estrictos, aunque entre las cinco y nueve de la mañana tendrán total libertad.
Reapertura
A su vez, adelantó que, después de que hace dos semanas se permitiera el retorno al trabajo de los trabajadores de la industria y de la construcción, el lunes reabrirán sus puertas las tiendas y el comercio que no esté vinculado con la alimentación, donde trabajan casi 300.000 personas, según el alcalde.
Rusia ocupa el tercer lugar después de Estados Unidos y Brasil por número de contagios registrados y acumula ya 370.680 casos de covid-19 y 3.968 decesos por esta enfermedad.