Giuliana Poveda es una muestra clara que la grandeza de una persona no se mide por el tamaño, sino por el empeño que pone para salir adelante. La pequeña deportista siempre tiene un motivo para sonreír y esta vez lo hace con orgullo porque posee el título de campeona mundial de bádminton (talla baja s6).
Es de estatura pequeña, pero posee un gran corazón que palpita a mil por horas cuando coge una raqueta y demuestra lo que mejor sabe hacer: brillar en el bádminton, como lo expuso en los Juegos Mundiales de Talla Baja disputado en Canadá, donde alcanzó las medallas de oro y de plata en singles y dobles, respectivamente.
“Estoy muy emocionada, no pensé ganar tanto en tan poco tiempo. El haber practicado muchos deportes me ayudaron a sobresalir. A eso se suma el apoyo de mi familia, el entrenamiento duro, la perseverancia y la disciplina”, expresa la badmintonista.
Desde que nació parece que el éxito es su destino. Ella ya es un orgullo más del arraigado barrio de Villa María del Triunfo. Ahí, en su colegio María Milagrosa, comenzó a practicar deportes como una pasión y por herencia familiar. El fútbol y el vóley fueron sus primeras lecciones, pero se inclinó por el bádminton.
‘La Peque’ solo tiene un año y medio desde que comenzó a practicar la disciplina de la plumilla y ya puso a brillar al Perú en la cima del podio.
Es una adolescente de 16 años, que tiene grandes responsabilidades consigo misma, por esa necesidad de superación y por su ambición de apuntar al cielo y hacerle sentir, de alguna manera, orgulloso a su padre, a quien perdió cuando tenía 11 años.
Con humildad, y ese don de psicóloga que asegura tiene Giuliana deja un mensaje claro a los jóvenes que ven esfumarse sus posibilidades de alcanzar su sueños.
“A los jóvenes, que no se rindan, porque la vida es bella y todos podemos nadie se puede quedar atrás. Los invito al Estadio Nacional a que practiquen deportes, porque todos podemos hay bastantes categorías para todos. Todos somos iguales, si hay una discapacidad no podemos deprimirnos por eso, sino por lo que tú eres”, expresó la medallista mundial.
No hay límites cuando se sueña en grande. Giuliana anhela ser la número uno a nivel mundial, y asevera que no se detendrá aunque el camino sea largo. Sabe que necesita a su madre como apoyo, por eso le agradece y dice que la ama por sobre todas la cosas.
Sus metas están en el deporte, pero también como profesional: ya es bilingüe y ahora su objetivo es hacerse una cineasta para grabar su propia historia.
Oportunidad
Gracias al programa ‘Pequeños Gigantes’, que impulsa el Instituto Peruano del Deporte (IPD) y que promueve la inclusión de personas con el trastorno genético denominado acondroplasia, Giuliana se pudo involucrar con el deporte y tener la posibilidad de desarrollarse y cumplir sus sueños.
En la actualidad, el programa ha sumado disciplinas, como pesas, natación, bádminton, fútbol, y poco a poco lo hacen más disciplinas.
(FIN) JSO
Publicado: 21/8/2017