El presidente de Gambia, Adama Barrow, anunció este sábado que la muerte de 60 gambianos el miércoles frente a costas de Mauritania al naufragar un barco con 200 migrantes rumbo España y prometió sanciones contra los responsables de esta "tragedia nacional".
"Perder la vida de 60 jóvenes en el mar es una tragedia nacional y objeto de inquietud para mi gobierno. Se iniciará una investigación policial para aportar luz a este grave desastre nacional", declaró Barrow en un discurso en la televisión pública.
La piragua a motor, que salió el 27 de noviembre de Gambia y se dirigía a las islas Canarias, archipiélago español frente a Marruecos, naufragó el miércoles frente a las costas de Mauritania.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dio cuenta de 62 muertos y una fuente de seguridad de 63 muertos, la mayoría de Gambia y 13 senegaleses.
"Los culpables serán perseguidos de acuerdo con la ley", señaló el presidente presentando sus condolencias a los familiares.
Los supervivientes del naufragio, cuya cifra no fue indicada, salieron este sábado de Mauritania en coches con rumbo a Gambia, constató un corresponsal de la AFP.
"Queremos que nuestros jóvenes permanezcan en el país para explotar nuestro potencial económico", agregó Barrow, anunciando un refuerzo de la lucha contra los traficantes de personas.
Además, otros 192 gambianos fueron interceptados el viernes en alta mar por los guardacostas mauritanos a bordo de un barco que se dirigía a España, según una fuente de seguridad mauritana.
Según la OIM, unas 25.000 personas ha muerto desde enero de 2014 tratando de llegar a Europa por razones económicas y políticas.
La mayoría (19.154) han perdido la vida en el mediterráneo, donde se encuentran las principales vías de acceso al continente europeo, pero más de 480 han muerto África del oeste, 160 de ellos en 2019.
Según el organismo, el naufragio del pasado miércoles es el más mortífero de este año en esta vía de acceso a Europa.
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(FIN) AFP/JAM
Publicado: 7/12/2019