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Familias asháninkas y andinas desarrollan proyectos sostenibles

Iniciativas son financiadas por proyecto Haku Wiñay de Foncodes

Familias asháninkas y andinas de Junín desarrollan proyectos sostenibles. ANDINA/Difusión

Familias asháninkas y andinas de Junín desarrollan proyectos sostenibles. ANDINA/Difusión

10:54 | Satipo, may. 21.

Proyectos productivos y emprendimientos rurales mejoran la economía y el nivel de vida de más de 800 familias usuarias del proyecto Haku Wiñay/Noa Jayatai del Foncodes en comunidades andinas y amazónicas de Tapo y Mazamari, en las provincias de Tarma y Satipo, región Junín.


El director ejecutivo de Foncodes, Gustavo Torres Vásquez, visitó los núcleos ejecutores de Tarma, y en Satipo, donde comprobó el impacto de la intervención de este proyecto productivo, por el cual las familias utilizando tecnologías de bajo costo, como el riego por aspersión, huertos a campo abierto y en fitotoldos, y módulos de abonos orgánicos, cultivan y consumen más hortalizas, cereales y tubérculos, también han puesto en marcha sus propios emprendimientos.

En compañía del jefe encargado de la Unidad Territorial La Merced, Moisés Herrera Córdova, el titular de Foncodes constató la mejora económica de las familias y dialogó con cada una de ellas sobre los avances del trabajo con Haku Wiñay/Noa Jayatai.


“Vemos con mucha satisfacción como los proyectos productivos de Foncodes sean sostenibles. Una muestra de ello ocurre en la comunidad de Pichaynoic, en el distrito de Tapo, en Tarma, donde después de un año de haber concluido el proyecto las familias siguen utilizando las tecnologías productivas”, indicó.

De igual modo, en las comunidades de la selva central, en Mazamari, en un periodo de dos años las familias han hecho suyo los conocimientos aprendidos del proyecto Noa Jayatai y ya muestran resultados en cultivos de hortalizas, crianza de animales menores (gallinas) y emprendimientos de cultivo de cacao.


Las usuarias Ruth Chumpe Chirisenbi, Luzmila Rosa Chumpe Tomas, Oswaldo Chirisembi Sánchez, y César Alejandro Soto, de las comunidades nativas ashaninkas de Cañete y Capirushari en Mazamari, recibieron en sus viviendas al director de Foncodes, a quién le mostraron cocinas mejoradas, crianza de gallinas, agroforestería, y emprendimientos de cacao, piscigranja, artesanías y servicio de alimentación para turistas. Ellos forman parte de 400 hogares que trabajan con el proyecto Haku Wiñay/Noa Jayatai.

Mientras que en la comunidad altoandina de Pichaynioc, en el distrito de Tapo, en Tarma, 405 hogares tienen módulos de cocinas mejoradas, pastos y forrajes, cuyes, cultivos de habas, arvejas, papas, ajos, quinua, hortalizas, y 29 grupos de interés recibieron activos y asistencia técnica para el manejo de sus emprendimientos, donde destaca los invernaderos de producción de semillas de papa.


En el distrito de Tapo, en Tarma, el proyecto Haku Wiñay/Noa Jayatai ha invertido 1 millón 518,000 soles, y en Mazamari, en Satipo, 2 millones 179,200 soles en proyectos productivos sostenibles.

En la región Junín, Foncodes interviene con proyectos productivos en comunidades rurales de las provincias de Tarma, Satipo, Chanchamayo, Huancayo y Concepción, donde desarrolla 66 proyectos por 29.8 millones de soles para atender a 7,562 familias de escasos recursos económicos.


A escala nacional, en el periodo 2012-2018, Foncodes financió un total de 1,491 proyectos con una inversión total de 709 millones de soles para 171,313 hogares usuarios en situación de pobreza y pobreza extrema de zonas rurales de la sierra y selva del país.

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(FIN) NDP/MAO

Publicado: 21/5/2018