Muchos hemos escuchado hablar de facturación electrónica y que su desarrollo ha simplificado procesos comerciales entre las empresas, lo cual resulta indispensable ahora que estamos viviendo una nueva normalidad como consecuencia de la pandemia del covid-19.
El gerente general del grupo financiero Inandes, Ricardo Gallo, explica que la factura electrónica es la versión digital de la factura comercial que conocemos ampliamente.
"Este sistema es un aporte realizado desde Latinoamérica para simplificar e incrementar el control en la emisión de estos documentos, mejorando así la recaudación y, por ende, disminuyendo la evasión y la informalidad", señala.
Según el especialista, la factura electrónica tiene algunas ventajas respecto a su contraparte impresa, las cuales se detalla a continuación:
- Estandariza los formatos de las facturas para los contribuyentes.
- No se necesita imprimir talonarios de facturas y sus 3 copias.
- La recepción por parte del cliente es automática y el registro en Sunat también.
- Simplifica el llenado de los libros de compras/ventas de las empresas.
- El tiempo de almacenamiento es amplio.
Ricardo Gallo sostiene que el objetivo principal para la Sunat es la mejora de los procesos de control y de recaudación, evitando la emisión de facturas físicas que no se declaran.
Es por ello que se han implementado tres sistemas de emisión electrónica (SEE), por los cuales las empresas pueden emitir sus facturas electrónicas:
- Sistema propio de la Sunat (SEE-SOL) y es gratuito.
- Sistemas propios desarrollados por los emisores (SEE-SDF).
- Sistemas de emisión ofrecidos por terceros (SEE-OSE).
El uso de determinada opción dependerá de la cantidad de documentos que se generen diariamente. Para una empresa con pocas operaciones diarias, el sistema SEE-SOL será suficiente. El inconveniente con el sistema de la Sunat es su rápida saturación por ser el más usado.
El gerente general de Inandes indica que hoy en día los sistemas de emisión electrónica incluyen los siguientes documentos:
- Factura electrónica, notas de crédito y de débito.
- Boletas de venta electrónicas y sus respectivas notas de crédito y de débito.
- Liquidación de compra electrónica.
- Recibo de honorarios electrónico.
- Guía de remisión electrónica.
Desde el 2010 la Sunat viene incorporando a las empresas a la emisión electrónica de sus facturas, teniendo aproximadamente 254,168 emisores hasta abril del 2020, los cuales han emitido en total (desde el inicio del sistema) 8,065 millones de documentos electrónicos, de los cuales 1,116 millones son facturas electrónicas.
Hasta esa fecha, el sistema más utilizado por los emisores es el SEE-SOL con un 70%, seguido por los desarrollos propios de los contribuyentes con un 19% y finalmente los SEE-OSE con un 11%.
La Sunat tiene como meta para la primera mitad de la siguiente década, que el 100% de la emisión de las facturas sea electrónica. Por el momento viene invitando a las empresas a incorporarse a este sistema. Esto no impide a las empresas que de manera voluntaria puedan empezar a emitir documentos electrónicos e incorporarse a esta manera de trabajo.
"Además de las ventajas antes mencionadas, la factura electrónica ha favorecido el crecimiento del negocio del factoring, dado que todo el proceso de presentación, aprobación y anotación en cuenta de las facturas se hace en la nube", dice Ricardo Gallo.
"Esto aunado a las transferencias electrónicas de dinero, han permitido que en la coyuntura actual en que vivimos, el financiamiento a las empresas bajo esta modalidad no se vea impedido. Hoy en día casi el 99% de las facturas que se negocian son electrónicas", agrega.
Si desea verificar si su empresa debe emitir este tipo de comprobantes, puede ingresar al siguiente link: http://www2.sunat.gob.pe/cpe/padronobligados.html