La población de Arequipa realizó sus actividades en la mañana con relativa normalidad. El servicio de transporte público es restringido y los centros de abastos lucen con gran afluencia de público, tras la declaratoria de estado de emergencia decretado por el presidente Martín Vizcarra.
Un sector de tiendas comerciales, que no expende precisamente productos de primera necesidad, abrió sus puertas al público. Las autoridades locales exhortaron a sus propietarios a cerrar sus establecimientos como lo establece las
medidas dispuestas por el Gobierno para enfrentar el
coronavirus Covid-19.
También se puede observar comercio ambulatorio en calles y avenidas, especialmente en zonas cercanas a mercados.
En las entidades bancarias se observa largas colas para ser atendidos, mientras que en las farmacias también se presenta gran afluencia de público.
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(FIN) RMC/MAO